Salimos el viernes hacia Trevelez donde dejamos un coche y después nos fuimos a Capileira a pasar la noche. A la mañana siguiente nos esperaba el bus hasta la Hoya del Portillo a 2700m desde donde partiríamos hacia el Mulhacén. Durante toda la subida nos acompaño un fuerte viento que hizo que la sensación térmica bajara considerablemente. Después de hacer cima y recuperar fuerzas comenzamos el descenso hasta siete lagunas donde pasaríamos la noche.
Al día siguiente y tras una noche bastante fresquita (6 graditos) desayunamos y bajamos hacia Trevelez, donde tras refrescarnos en un lavadero antiguo nos dimos un homenaje en el mesón del jamón. Sin duda un fantástico fin de semana en buena compañía.
